El Cardenal Hollerich, Arzobispo de Luxemburgo y ex presidente de la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Comunidad Europea (COMECE), ha expresado su preocupación por el creciente auge de la carrera armamentística y lo que considera una "caída en la tensión moral" entre los líderes mundiales.
En el contexto de tensiones políticas y militares crecientes y un equilibrio de poderes amenazado por el incremento en la producción y distribución de armas, Hollerich insta a los líderes a recuperar una moral de paz y reflexionar sobre las consecuencias de sus decisiones. Su denominado a la cooperación internacional es un intento de contrarrestar la superación del "tabú de la guerra" y promover un mundo más pacífico y seguro.
El creciente auge de la carrera armamentística es motivo de preocupación y temor. El Arzobispo de Luxemburgo y ex presidente de la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Comunidad Europea (COMECE), el Cardenal Hollerich, reflexiona sobre lo que considera una "caída en la tensión moral" que parece afectar a los líderes de gran parte del mundo, en contraposición a la superación del "tabú de la guerra".
Hollerich señala que el mundo sólo puede volver a vivir en paz en un marco de multilateralismo. Esta postura se vuelve especialmente relevante en un contexto global donde las tensiones políticas y militares parecen intensificarse, y donde el equilibrio de poderes se ve amenazado por el incremento en la producción y distribución de armamento.
El Cardenal insta a los líderes mundiales a recuperar una moral de paz, en un denominado a la reflexión sobre las consecuencias de las decisiones políticas y militares en el plano internacional. Su mensaje es un recordatorio de la importancia de la cooperación entre naciones para la consecución de un mundo más pacífico y seguro.
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