Jornada de Oración y Reflexión: Uniendo a la Iglesia contra la Trata de Personas La Iglesia celebra el próximo sábado 8 de febrero la Jornada de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas, bajo el lema "Embajadores de la Esperanza: juntos contra la trata de personas". El evento, que busca promover la unión y el compromiso para erradicar esta lacra social, coincide con la memoria litúrgica de Santa Josefina Bakhita, ex esclava que dedicó su vida a Cristo. Begoña Iñarra, coordinadora de la Comisión contra la Trata de Madrid, insta a todos a ser portadores de esperanza y luchar contra la trata de personas. Además, la Comisión Di. El próximo sábado 8 de febrero, la Iglesia celebra la Jornada de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas. Este año, bajo el lema "Embajadores de la Esperanza: juntos contra la trata de personas", se busca promover la unión y el compromiso de todos para erradicar esta lacra social. La fecha coincide con la memoria litúrgica de Santa Josefina Bakhita, quien tras haber sido esclavizada, encontró en Cristo la verdadera libertad y dedicó su vida a Él. Begoña Iñarra, coordinadora de la Comisión contra la Trata de Madrid, subraya que este lema es una invitación personal de Cristo a cada uno de nosotros para ser portadores de esperanza y luchar juntos contra la trata de personas hasta erradicarla. Iñarra advierte que, ante una realidad tan desgarradora, no podemos mirar hacia otro lado ni delegar esta misión en otros. Iñarra recuerda que la trata de personas es una herida abierta en nuestra humanidad. Más allá de las cifras, cada víctima tiene un rostro, una historia de sueños rotos y una dignidad arrebatada. Según el Papa Francisco, la trata desfigura la humanidad de la víctima, deshumaniza a quienes la perpetran y también a quienes permanecen indiferentes ante esta terrible realidad. Por ello, Iñarra insiste en que la trata es una plaga que debemos erradicar juntos, con compromiso, esperanza y acción. Ser embajadores de esperanza significa no solo sensibilizarnos a nosotros mismos, sino también a los demás; orar por las víctimas, pero sobre todo actuar para transformar las estructuras que permiten esta explotación. También implica trabajar unidos para proteger a los más vulnerables: mujeres, niños, migrantes, refugiados, desplazados forzosos... En el Año Jubilar 2025, la Iglesia en España ha elegido la lucha contra la trata de personas como eje central de su compromiso social. Esto no es casualidad, señala Begoña Iñarra, sino una respuesta urgente y necesaria a una realidad que no está lejos de nosotros. La trata no es algo distante ni ajeno a nuestras vidas. Está aquí, entre nosotros, en nuestras ciudades y comunidades. Permanece oculta, pero es una realidad bien presente. En esta jornada, Iñarra invita a abrir los ojos y el corazón, a rezar por quienes sufren esta esclavitud, pero también a implicarnos activamente en erradicarla. Recuerda que cada pequeño gesto cuenta: informarnos, compartir información y apoyar iniciativas que trabajan en la prevención, la protección de las víctimas y la persecución de quienes se lucran con esta injusticia. Al comprometernos en esta lucha, nos liberamos también nosotros, liberamos a nuestras comunidades del egoísmo y la indiferencia, y avanzamos hacia una humanidad más libre, más justa y más fraterna. En el marco de la Jornada de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas, la Comisión Diocesana contra la Trata de Personas de Madrid ha organizado una Vigilia de Oración, que tendrá lugar el miércoles 12 de febrero, a las 20h, en la parroquia de Nuestra Señora de las Angustias. Unámonos en oración, reflexión y acción, porque esta lucha merece la pena, concluye la coordinadora.

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