La Ministra de Turismo y Antigüedades de Jordania, Lina Annab, emitió un mensaje de paz y amor basado en los valores del cristianismo durante la exposición "Jordania: Alba del Cristianismo" en Roma.
Esta declaración, realizada a los medios vaticanos, ocurrió en el Palacio de la Cancillería, donde se encuentra la exposición hasta el 28 de febrero. Annab destacó la importancia de la presencia cristiana en Jordania, un país conocido por su pluralismo religioso, y cómo este pluralismo contribuye a una sociedad pacífica y tolerante. A través de la exposición, Jordania.
El Reino Hachemita de Jordania, a través de su Ministra de Turismo y Antigüedades, Lina Annab, ha emitido un fuerte mensaje de paz y amor enmarcado en los valores del cristianismo. La declaración tuvo lugar en el marco de la exposición "Jordania: Alba del Cristianismo", que se está llevando a cabo en el Palacio de la Cancillería de Roma hasta el 28 de febrero.
Annab, en declaraciones a los medios vaticanos, ha destacado la importancia de la presencia cristiana en Jordania, un país caracterizado por su pluralismo religioso. "El mío es un país donde los cristianos han vivido, viven y seguirán viviendo. Este es un mensaje muy importante para nosotros. La sociedad está hecha de pluralismo", expresó la ministra.
La exposición "Jordania: Alba del Cristianismo" es una oportunidad para conocer más de cerca la historia y la cultura de Jordania, una nación que ha albergado a comunidades cristianas desde los albores del cristianismo. A través de esta muestra, Jordania busca enviar un mensaje de paz y amor, valores centrales del cristianismo, al mundo entero.
El mensaje de la ministra Annab resalta la importancia del respeto a la diversidad religiosa y cultural en la construcción de una sociedad pacífica y tolerante. A través de su historia y su presente, Jordania se presenta como un ejemplo de convivencia y respeto mutuo entre diferentes comunidades religiosas.
La exposición estará abierta al público hasta el 28 de febrero en el Palacio de la Cancillería de Roma.
El elogio al Papa Francisco como modelo de humildad y servicio refleja su verdadera fidelidad al Evangelio, recordándonos que la autoridad en la Iglesia debe ser siempre un servicio amoroso, no poder. Que su ejemplo inspire a todos a vivir la fe con sencillez y entrega.
La liberación del padre Ibrahim muestra la fuerza de la oración y la fe en medio de la violencia. La comunidad demuestra que, en la unión y la fe, la esperanza nunca muere. La Iglesia sigue siendo faro de esperanza en tiempos difíciles.
Escribir un comentario