En Pekín, los católicos de China han inaugurado el mes mariano con una jornada de comunión y gratitud, centrada en la oración por el Papa Francisco y el próximo Cónclave.
Este evento, celebrado en un ambiente de recogimiento, ha puesto de manifiesto la profunda conexión espiritual que une a los fieles chinos con la Iglesia universal. Durante la jornada, los participantes han dedicado sus plegarias al Santo Padre y al importante evento eclesial, subrayando así la relevancia de la unidad y la fe compartida en estos momentos significativos para la comunidad católica. Este acto de devoción refleja el compromiso de los católicos chinos con la Iglesia y su deseo de contribuir espiritualmente al bienestar de la misma.
Pekín (Agencia Fides) – Una jornada de comunión y gratitud por los dones de la gracia ha marcado el inicio del mes mariano para los católicos en China. En este contexto, los fieles han dedicado sus oraciones al Papa Francisco y al próximo Cónclave. Este acto de devoción se ha llevado a cabo en un ambiente de recogimiento, reflejando la profunda conexión espiritual que une a los católicos chinos con la Iglesia universal. La oración por el Papa y el Cónclave subraya la importancia de la unidad y la fe compartida en estos momentos significativos.
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